martes, 6 de noviembre de 2012

Entrada 4. A un lado los problemas




Reflexionando mi situación y después de mucho rato de estar pensando cómo olvidarme de mis problemas, decidí  dejar a un  todo. Saqué de mi bolsillo mi celular y entré a mi cuenta en facebook. Encontré en eventos de la semana “Eva & óscar fest”. Qué tonta, ¿cómo pude olvidar que hoy era la fiesta de mis amigos? Leí las condiciones las  cuáles eran: ir disfrazado o llevar tu credencial de” reportero de bizbirije”. ¡Qué ocurrente es Eva! Pensé con una sonrisa en mi rostro. ¡Oh que divertido, habría premio para el mejor disfraz, una botella de “Torres 10”!

Salí de mi cuenta y me dirigí a la cocina dónde se encontraba mi mamá. Pregunté con inseguridad:

—¿Me dejarías ir a una fiesta de disfraces al rato?

—¿En dónde va a ser? Dijo molesta.

—En Brizas, cerca de la FES Acatlan

—No lo sé. Más tarde te digo porque lo pensaré.

—No seas mala. Comenzará a las 20:30 horas. Nos dio la opción de  quedarnos a dormir si nos queda lejos nuestra casa, además de que no es  seguro regresar a la casa tarde.Estará en la fiesta su papá.

No mentía. El año pasado así fue también. A pesar de que todos estamos en un rango de edad de 20 a 26 años, él nos vigilaba. Y así seria de nuevo. Por ratos bajaba de su cuarto a darse un  rol por la casa para supervisar que hacíamos. Nos miraba con ojos de “nadámas que rompan o hagan destrozos en mi casa y me pagan todos los desperfectos”. Al verlo  caminar a todos nos intimidaba y murmuraban por todos lados”¿es su papá de Eva?”todos muy sorprendidos.

Me retiré a mi cuarto a esperar la decisión de mi madre. Pensé que me dejaría  ir, así que me dispuse a buscar mi disfraz. Lo guarde en mi bolsa, como también mi maquillaje y unos zapatos. Subió a mi cuarto mi mamá y con una cara medio enojada dijo:”Sí puedes ir. Con la condición de que llegues temprano,  mañana domingo. Nada de que se te ocurra venirte tarde.
Muy emocionada  le dije:

—Está bien. Anotaré el número telefónico de la casa de  Eva por si quieres llamar— escribí en una hoja y se la entregué.

Al poco rato sonó mi celular y era Luis, preguntando si iba a poder  ir. Le confirmé y quedamos de vernos a las 19:30 horas. Salí muy emocionada de mi casa, ya que había logrado que mi mamá me diera permiso, porque mi papá no estaba para decirle a él también. Cuando saludé a Luis me di cuenta que no traía disfraz así que le pregunte ¿dónde está tu disfraz? Contestó que lo traía en su mochila y muy conforme le dije “Si no falta nada, entonces vamonos”. Nos dirigimos a la casa de Eva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario